Este dispositivo no aspira a tener un alcance masivo. A muchos usuarios no les encajará porque considerarán que su smartphone les ofrece lo mismo. Y mucho más. Y si nos ceñimos a los números, a las especificaciones, es cierto. Al menos en gran medida. Pero no debemos pasar por alto que este es un producto con personalidad propia. No es un teléfono «capado», a pesar de que en sus entrañas late Android; es un ingenio diseñado exclusivamente para ofrecernos la mejor experiencia posible con nuestra música favorita.
Su pertenencia a la gama Walkman es toda una declaración de intenciones por parte de Sony. Y es que todas las características de este reproductor, como su diseño externo, su arquitectura interna y las apps que vienen preinstaladas, están pensadas para escuchar música. Solo para escuchar música. Por esta razón que este producto tenga o no sentido dependerá de si realmente consigue ofrecernos una experiencia más satisfactoria que un smartphone en este escenario de uso en particular. El propósito de este análisis es, precisamente, responder esta pregunta.
Sony NW-A105: especificaciones técnicas
Antes de que empecemos a indagar en la experiencia que nos propone este dispositivo merece la pena que dediquemos unos minutos a repasar sus características más relevantes. Es la manera más eficaz de intuir qué es lo que nos está sugiriendo Sony. El elemento que actúa como interfaz principal entre nosotros y el hardware del dispositivo es la pantalla, aunque, como veremos un poco más adelante, los siete botones alojados en el perfil derecho del reproductor también son importantes porque nos permiten actuar sobre la reproducción sin necesidad de recurrir a la pantalla. Esta ya es una diferencia relevante que permite a este dispositivo distanciarse de los teléfonos móviles.
Este reproductor incorpora un panel TFT táctil de 3,6 pulgadas en color asistido por retroiluminación LED blanca y con una resolución de 1.280 x 720 puntos. No es una pantalla espectacular, pero cumple su cometido perfectamente
La pantalla se apoya en un panel TFT táctil de 3,6 pulgadas en color asistido por retroiluminación LED blanca y con una resolución de 1.280 x 720 puntos. No es una pantalla espectacular ni por su nivel de detalle ni por la forma en que reproduce el color, pero no hace falta en absoluto que lo sea. Este dispositivo no está pensado para ver fotografías o reproducir vídeos, aunque es posible utilizarlo para ambas cosas, por lo que su pantalla tiene la calidad adecuada para permitirnos administrar nuestra biblioteca musical y controlar la reproducción. De esto se trata en el fondo. Para todo lo demás es preferible recurrir a nuestro teléfono móvil.

El sistema operativo sobre el que se ejecutan las apps es Android 9.0, exactamente la misma plataforma que podemos encontrar actualmente en muchos smartphones. Su interfaz también es la misma a la que estamos acostumbrados, pero Sony ha aligerado este software tanto como es posible para evitar que interfiera con el rendimiento del dispositivo cuando lo estamos utilizando para escuchar música. Y me parece un acierto porque, aunque la marca japonesa no ha desvelado cuál es el SoC que incorpora este reproductor, es muy probable que se trate de un chip con unas prestaciones comedidas, y no de uno de los potentes microprocesadores que gobiernan los móviles de gama media y alta actuales.
La capacidad de almacenamiento de este dispositivo es 16 GB, una cifra a priori no demasiado generosa, pero que, en teoría, debería permitirnos almacenar una biblioteca musical amplia incluso utilizando formatos de audio en alta resolución. Nada de eso. El espacio útil del reproductor nada más sacarlo de la caja es de solo 6,7 GB. El 58% del espacio lo ocupan el sistema operativo y las apps preinstaladas, por lo que más pronto que tarde nos veremos obligados a comprar una tarjeta micro-SD para ampliar sensiblemente su capacidad. Afortunadamente su precio se ha reducido mucho durante los últimos años, por lo que hoy podemos hacernos con una tarjeta de 32 GB por 6 euros. O con una de 64 GB por poco más de 11 euros.
Este reproductor de la familia Walkman es capaz de procesar archivos DSD, PCM lineal, FLAC, WAV, AAC, HE-AAC, MQA y toda una retahíla de códecs de audio que nos permite despreocuparnos del formato en el que hemos almacenado nuestra música
Una última característica de este reproductor en la que me parece importante que indaguemos es el abanico de formatos de codificación de los ficheros de audio con el que es capaz de trabajar. Puede procesar ficheros DSD de hasta 11,2 MHz para pasarlos a PCM lineal; reproduce FLAC de hasta 24 bits, WAV de hasta 32 bits y 384 kHz, AAC y HE-AAC; PCM lineal de hasta 24 bits y 192 kHz, etc. Si queréis conocer con detalle toda la retahíla de formatos de codificación de audio que este reproductor es capaz de procesar podéis echar un vistazo a la tabla que tenéis a continuación, pero antes de seguir adelante me gustaría hace un breve inciso y dedicar unas líneas a un formato más que este dispositivo también es capaz de descodificar: MQA (Master Quality Authenticated).
Esta sigla identifica un códec de audio que utiliza compresión con pérdida de calidad y que fue lanzado en 2014 por el fabricante británico de componentes de alta fidelidad Meridian Audio. Su impacto en la industria de la música ha sido importante, tanto que ha recibido el apoyo de sellos como Warner Music o Lindberg Lyd (2L), y también del servicio de música en streaming Tidal, pero esto no ha impedido que haya sido objeto de críticas bastante duras que ponen en tela de juicio tanto la calidad del códec como el modelo de licencia impuesto por sus propietarios. Algunos de sus detractores son los fabricantes de equipos de alta fidelidad Linn Products y Schiit Audio, escocés el primero y estadounidense el segundo.
SONY NW-A105 | Características |
---|---|
CAPACIDAD DE ALMACENAMIENTO | 16 GB |
PANTALLA | TFT táctil de 3,6 pulgadas en color con retroiluminación LED blanca y resolución HD (1.280 x 720 puntos) |
FORMATOS COMPATIBLES | MP3 (.mp3): 32 Kbps - 320 Kbps (compatible con tasa de bits variable [VBR])/32 kHz, 44,1 kHz, 48 kHz, WMA (.WMA): 32 Kbps - 192 Kbps (compatible con tasa de bits variable [VBR])/44,1 kHz, FLAC (.flac): 16 bits, 24 bits/8-384 kHz, WAV (.WAV): 16 bits, 24 bits, 32 bits (flotante/integrado)/8-384 kHz, AAC (.mp4, .m4a, .3gp): 16-320 Kbps/8-48 kHz, HE-AAC (.mp4, .m4a, .3gp): 32-144 kbps / 8-48 kHz, Apple Lossless (.mp4, .m4a): 16 bits, 24 bits/8-384 kHz, AIFF (.aif, .aiff, .afc, .aifc): 16 bits, 24 bits, 32 bits/8-384 kHz, DSD (.dsf, .dff): 1 bit/2,8224 MHz, 5,6448 MHz, 11,2896 MHz *Se extrae audio que se convierte a PCM lineal, APE (.ape): 8 bits, 16 bits, 24 bits/8-192 kHz (rápida, normal, alta), MQA (.mqa, .flac): Compatible |
SISTEMA OPERATIVO | Android 9.0 |
AMPLIFICADOR DE AURICULARES | Respuesta en frecuencia: 20 Hz a 40 kHz Potencia de salida máxima (JEITA 16 ohmios/mW): 35 mW + 35 mW |
CANCELACIÓN ACTIVA DEL RUIDO | Noise Cancelling digital y selección del entorno NC: Reducción de ruido mediante inteligencia artificial (AINC) completamente automática, Autobús/tren, Avión, Oficina |
CONEXIONES | Jack de 3,5 mm para auriculares, ranura para tarjetas micro-SD y puerto de conexión USB de tipo C |
CONECTIVIDAD INALÁMBRICA | WiFi 802.11ac, Bluetooth 5.0 y NFC |
TIEMPO DE CARGA | 5,5 horas |
DIMENSIONES | 55,9 x 98,9 x 11 mm |
PESO | 103 g |
PRECIO | 349 euros |
Sony NW-A105 - Reproductor de Audio Walkman (16GB, Hi-Res Audio, Wi-Fi, Bluetooth, Pantalla táctil de 3.6", Android 9.0, S-Master HX, DSEE-HX, USB Tipo C) Verde
Compacto y diseñado para durar, como corresponde a un 'walkman'
Las fotografías que ilustran este análisis no hacen justicia a lo bien diseñado y acabado que está este reproductor. Su caja está fabricada en aluminio reforzado y no contiene ni un solo tornillo visible. Además, la pantalla está mucho menos expuesta que la de un smartphone y es más pequeña, por lo que no me cabe ninguna duda de que este dispositivo soporta mejor las caídas que la mayor parte de los teléfonos móviles. Afortunadamente durante mis pruebas no se me cayó al suelo ni una sola vez, y la mayor parte del mérito la tienen el tacto ligeramente rugoso de la caja de aluminio del reproductor y sus bordes curvos, que permiten agarrarlo de una forma muy sólida. Desde un punto de vista estrictamente constructivo no puedo ponerle ni una sola pega.
En los primeros párrafos del artículo os he adelantado que este dispositivo tiene menos en común con los teléfonos móviles de lo que parece. El diseño y el acabado de su caja de aluminio solo son los primeros indicios de esta estrategia. Lo realmente interesante está en su interior debido a que la distribución de los componentes en su placa de circuito impreso está ideada para optimizar su calidad de sonido. Esto no sucede en los smartphones, por muy cuidados que estén. Una decisión de diseño que los ingenieros de Sony han tomado directamente de los componentes de alta fidelidad es que el bloque de audio analógico, que es la sección en la que residen el DAC y el circuito integrado de amplificación, está físicamente separado tanto del bloque de alimentación como de la sección de audio digital con el propósito de evitar la injerencia del ruido digital en la delicada señal analógica.
Puede parecer un recurso algo exagerado, pero no lo es si tenemos presente que, precisamente, este tipo de decisiones son las que permiten a este dispositivo exacerbar su calidad de sonido y desmarcarse de los teléfonos móviles. En cualquier caso, esta no es la única idea que han tomado los ingenieros de Sony de los componentes de alta fidelidad. Los condensadores utilizados en la sección analógica son de película de alta calidad, por lo que son con toda seguridad similares a los que marcas carísimas y con pedigrí audiófilo como McIntosh, Krell o Audio Research utilizan en sus productos. Su razón de ser no es otra que preservar la integridad de la señal analógica.
Otra decisión que delata la minuciosidad con la que ha sido fabricado este reproductor es que la conexión entre la batería y los componentes de la placa de circuito impreso se ha confiado a una soldadura sin plomo que incorpora una pequeñísima cantidad de oro. La elección de este elemento no responde a una razón esotérica o lujosa, sino, simplemente, al hecho de que la conductividad eléctrica del oro es superior a la de los elementos que suelen utilizarse habitualmente en las soldaduras de los dispositivos electrónicos.

La fotografía que podéis ver justo encima de estas líneas muestra los siete botones alojados en el perfil derecho del reproductor necesarios para encenderlo, subir y bajar el volumen, actuar sobre la reproducción sin necesidad de recurrir a la pantalla táctil y bloquear los botones para impedir su pulsación accidental cuando, por ejemplo, nos metemos el dispositivo en el bolsillo. En el perfil inferior de este walkman residen el jack de 3,5 mm para auriculares (un conector indispensable en un reproductor con vocación audiófila como este), el puerto USB de tipo C al que tenemos que recurrir para cargar la batería y la ranura para tarjetas micro-SD que, como he mencionado unos párrafos más arriba, nos invita a apostar por una tarjeta micro-SDXC o micro-SDHC para ampliar la exigua capacidad de almacenamiento de este dispositivo.

No solo suena bien; también se ocupa del ruido y el sonido de ambiente
Antes de describir mis impresiones acerca del sonido de este reproductor me parece importante indagar en una prestación interesante que puede tener un impacto importante en nuestra experiencia siempre y cuando utilicemos este dispositivo en espacios ruidosos: la cancelación de ruido digital. Sí, si nuestros auriculares no tienen cancelación de ruido no pasa nada: nos la proporciona el reproductor. Y funciona. No tiene un rendimiento espectacular (mi referencia en este terreno siguen siendo los fabulosos auriculares WH-1000XM3 de la propia Sony), pero cuando el ruido de fondo es relativamente homogéneo y tiene un nivel de presión sonora persistente la cancelación consigue atenuarlo de forma perceptible. Para activar la tecnología de cancelación del ruido tenemos que recurrir a la app Noise Cancelling que viene preinstalada.
Esta herramienta nos ayuda a afinar el rendimiento de la cancelación actuando sobre un control deslizable que nos permite seleccionar uno entre treinta niveles de cancelación posibles. También podemos indicar a la app en qué tipo de entorno nos encontramos (autobús o tren, avión u oficina) con el propósito de que el algoritmo de cancelación tenga más información acerca de las características del ruido de fondo. No obstante, desde esta app no solo podemos habilitar el algoritmo de cancelación; también incorpora un modo específico que nos permite actuar sobre el nivel de presión sonora del sonido ambiental. Esta prestación es útil si queremos que nuestra música se imponga al sonido de fondo, pero manteniendo un cierto grado de atención sobre el entorno en el que nos encontramos (por ejemplo, si estamos caminando por la calle). Al igual que la cancelación del ruido, la app nos permite ajustar el nivel de sonido ambiental manipulando un control deslizable.
Para analizar la calidad de sonido de este reproductor recurrí a dos auriculares diferentes: unos WH-H910N de la propia Sony y unos Audio Technica ATH-M50. Estos últimos son desde hace varios años mis auriculares de referencia. Ambos modelos son circumaurales, electrodinámicos y de recinto cerrado, y los ATH-M50 en particular tienen una combinación de impedancia y sensibilidad muy útil para revelar las carencias de la sección de amplificación del reproductor. En lo que se refiere a la música utilicé varios cortes que conozco muy bien en formato DSD, PCM y FLAC con una resolución de 24 bits y una frecuencia de muestreo de 96 kHz. Podéis ver algunos de estos temas musicales en la siguiente fotografía del artículo.
Sony no ha revelado las características precisas del DAC integrado en este dispositivo, y de la sección de amplificación para auriculares solo conocemos su respuesta en frecuencia (20 Hz a 40 kHz) y su potencia de salida máxima ajustada al estándar JEITA (35 mW + 35 mW). Aun así, cuando la toma de sonido de la grabación que estamos escuchando tiene la suficiente calidad el audio de este reproductor es incisivo, detallado y muy dinámico sin importar el rango del espectro de frecuencias audible en el que nos fijemos. Las voces tienen resolución y riqueza armónica, los agudos son detallados y los graves tienen el impacto del que tanto se benefician algunos géneros musicales, como el rock, el jazz o la música clásica. La calidad de sonido de este modelo de la gama Walkman es alta, pero si queremos sacarle el máximo partido posible es imprescindible que utilicemos unos buenos auriculares. Pueden ser inalámbricos o con cable, pero tienen necesariamente que ser de buena calidad debido a que su impacto en el sonido es aún mayor que el del propio reproductor.

Además de las aplicaciones que nos propone este dispositivo para reproducir nuestros cortes favoritos, administrar nuestra biblioteca musical y habilitar tanto la cancelación del ruido como el modo de sonido ambiental, incorpora una app adicional que contiene un ecualizador y varios filtros. Yo soy partidario de respetar a pies juntillas la toma de sonido original (siempre y cuando sea de calidad), y también de limitar el postprocesado de la señal de audio, por lo que suelo decantarme por una ecualización plana. Eso sí, admito que es una opción personal y me parece igualmente respetable tomar el camino contrario. En cualquier caso, esta app permite que quien quiera ecualizar el sonido a su gusto pueda hacerlo con total libertad.
Los filtros, por su parte, sirven para procesar los ficheros comprimidos en MP3 con la intención de incrementar su nivel de detalle y riqueza armónica (algo que, honestamente, no me convence porque dudo que realmente alcancen este objetivo); para reforzar la respuesta de baja frecuencia, minimizar la diferencia de volumen entre los temas musicales de nuestra biblioteca y emular la calidez del sonido de los discos de vinilo (intuyo que para hacerlo introducen distorsión de segundo orden). El filtro que nos permite normalizar el volumen de nuestros temas musicales me parece útil, pero los demás no me convencen porque requieren llevar a cabo un postprocesado de la señal de audio en el dominio digital que inevitablemente va a alterar la toma de sonido original. Aun así, solo es una decisión personal, por lo que creo que merece la pena que cada usuario decida con libertad si estos filtros encajan o no en sus preferencias.

Este reproductor ha salido bien parado de todos los escenarios de prueba a los que lo hemos sometido hasta ahora, pero tiene un «talón de Aquiles»: su autonomía. Las cifras que promete Sony en sus especificaciones pintan bien porque oscilan entre las 8 horas que en teoría alcanza al reproducir ficheros DSD con el modo de sonido de ambiente activado y las 26 horas que nos ofrece al reproducir archivos MP3 con el modo de sonido de ambiente desactivado. El problema es que estas cifras son demasiado optimistas. La autonomía de este dispositivo está condicionada por el formato de los archivos de audio que reproducimos, por la activación de la cancelación del ruido y el modo de ambiente, por los filtros que utilicemos y por el nivel de presión sonora al que nos gusta escuchar nuestra música. Incluso la app de reproducción que usamos tiene un impacto claro en el consumo.
En cualquier caso, durante mis pruebas la autonomía mínima del dispositivo fue de 132 minutos reproduciendo archivos DSD y FLAC de alta resolución desde la propia app de reproducción de Sony, con la cancelación del ruido activada, la pantalla apagada y el volumen al 75 (de un valor máximo de 120). A partir de aquí si utilizamos auriculares inalámbricos, reproducimos ficheros MP3, y desactivamos la cancelación del ruido y el modo de sonido de ambiente tendremos una autonomía sensiblemente mayor, pero en ningún caso equiparable a las cifras anunciadas por Sony. En mi opinión en este terreno este reproductor tiene un margen de mejora importante, y no tengo claro que una actualización del firmware consiga dilatar mucho más la autonomía.
Un último apunte antes de encarar la recta final del análisis: el proceso de carga de la batería desde 0 al 100% utilizando el puerto USB de mi MacBook Pro requirió cinco horas y cuarenta y siete minutos, un plazo que también me parece demasiado largo. Eso sí, si empleamos en la carga un transformador de alimentación similar al que incorporan muchos smartphones, que no está incluido junto al reproductor, este proceso se acorta mucho. Yo he utilizado uno con una salida de 5 voltios / 2 amperios y la carga se prolongó durante unos mucho más comedidos 85 minutos.

Sony NW-A105: la opinión de Xataka
Antes de escribir el texto de este análisis he utilizado este reproductor de forma intensa durante quince días. Y me gusta. Como os he confesado en las primeras líneas de este artículo no me parece un producto concebido para alcanzar una gran penetración en el mercado ni por sus características ni por su precio, pero es un dispositivo muy interesante para los usuarios que quieren escuchar su música con la máxima calidad de sonido posible y prefieren mantener su biblioteca musical a buen recaudo fuera de su teléfono móvil.
Su baza más contundente es su calidad de sonido, pero también convence por lo bien que está fabricado, así como por su ligereza y su diseño. Incluso las conexiones Bluetooth y WiFi, que en este tipo de dispositivos con frecuencia dan más problemas de los deseables, se han comportado de una forma muy estable durante mis pruebas. El problema es que también tiene varias carencias que empañan algo la experiencia, como una autonomía limitada si lo utilizamos para escuchar música en alta resolución con la cancelación de ruido o el modo de ambiente activado, y una capacidad de entrega de potencia comedida que no permite al reproductor ofrecernos un nivel de presión sonora realista si utilizamos unos auriculares con una impedancia exigente (47 ohmios o más). Eso sí, si nuestros hábitos de uso nos permiten sortear estas debilidades y su precio encaja en nuestro presupuesto, merece la pena tenerlo en cuenta. Es un dispositivo que debería proporcionarnos muchas horas de disfrute musical durante muchos, muchos años.

Este producto ha sido cedido para la prueba por parte de Sony. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.
Sony NW-A105 - Reproductor de Audio Walkman (16GB, Hi-Res Audio, Wi-Fi, Bluetooth, Pantalla táctil de 3.6", Android 9.0, S-Master HX, DSEE-HX, USB Tipo C) Verde
Más información | Sony
Ver 57 comentarios
57 comentarios
mundoecuestre
Sólo le falta incorporar el teléfono y la cámara de fotos, con ese tamaño a mi me encantaría.
renuente
A diferencia de los que podría pensarse,es un producto necesario, pero me falla el que no disponga de radio FM sin depender de internet.
xlolx
Personalmente me parece un producto muy bueno.
Me gusta tener la música aparte del móvil, porque no me gusta que me interrumpan las canciones las malditas notificaciones del WhatsApp, del email, del teléfono...
La autonomía me resulta suficiente para mis hábitos, no pienso estar ocho horas diarias enchufado y lejos de un enchufe, con lo que no hay problema.
El precio me parece más que razonable, teniendo en cuenta las prestaciones y la calidad.
Respecto al espacio de almacenamiento, no tengo siquiera pensado instalar nada en él, así que si tiene 6GB para el usuario, casi que me están sobrando 5GB, porque la música va a ir directa a una SD, sobre todo teniendo una colección que ronda los 200GB.
En cuanto lo tenga a tiro, pienso meterlo en el bolsillo a hacer compañía a los 1000XM3
xelux
La gente que suelta comentarios del tipo "Por ese precio tengo X moviles mejores!"
Está claro que no ha entendido nada.
A mi me parece un producto bastante redondo para lo que es, lo peor que me parece es la duración de la batería, debería ser al menos de 3 horas y así te aseguras una jornada completa, por ejemplo hora y media de ir al trabajo y otra hora de volver o cosas así.
Por lo demás, un producto muy interesante
Nacho
Yo sigo usando un iPod nano 7 para hacer deporte y no lo cambiaría por nada, para mi la ventaja de no llevar el smartphone cuando haces deporte es que puedes desconectar de verdad.
vvv113
Lo primero, gracias por el análisis Juan Carlos. Visto el equipo que tienes, a partir de ahora tus críticas sobre temas de alta fidelidad les presto mayor atención.
Lo segundo. Buen análisis. Hay bastante en el mercado de audio portátil y este podría ser una serie de artículos, al menos para mí, interesantes y muy útiles.
Al final, lo que escucha cada uno tiene una parte analítica y otra personal de las condiciones naturales de cada cual: no todos oímos de igual manera. Por tanto, en mi caso, busco críticos y críticas sobre referencias que estén a mi alcance para cotejar mi nivel de emparejamiento con la escucha por parte del crítico y poder sacar mis propias conclusiones.
Si me lo permites, te hago alguna sugerencia:
+ Comparar el producto en el rango de precio con otros de marcas reconocidas e incluso con alguna marca no reconocida. Comparar con dos o tres productos.
+ Escucha con Auriculares cerrados y abiertos y ver, bajo tu criterio, cómo se emparejan. Has comentado que no sueles recurrir a auriculares, pero si hay posibilidad de que lo hagas, ahí lo dejo.
Lo dicho, gracias por el artículo.
awsomo
Me hace gracia lo de la soldadura en oro. Se me hace difícil creer que el punto débil de la cadena de audio esté en la conductividad de las soldaduras o que estas vayan a tener un impacto apreciable.
Las soldaduras en plomo tengo entendido que están prohibidas
DrKrFfXx
Al fin cambiaron a USB C.
ondersotomayor
Me pregunto si es mejor que el fiio m7
gusmarzocchi1
Para hacerlo mas interesante tendrian que haberle incorporado alimentacion por pilas aaa recargables de toda la vida para darle un "caracter" de producto mas longevo e inmortal, destacando asi de esta forma el producto mismo, de un mar atiborrado hasta las tetas de opciones digitales de reproducción (smarfons) mas no de calidad y mucho menos de Originalidad.......
rennoib.tg
Entiendo el valor de lanzarlo al mercado ahora que los iPods se han rendido a los teléfonos, pero tiene importantes fallos. Como dicen, no tener radio en un dispositivo plenamente de audio puede ser delito aunque la calidad que ofrezca no sea buena. El espacio que incluye es de risa cuando está pensado para sonido en alta calidad, que ocupa bastante. Teniendo en cuenta que seguramente tenga un procesador bastante limitado y que su función es casi exclusivamente sonido, diría que no está del todo bien optimizado.
Eso sí, el tema de tener botones y reducción de ruido me parece muy interesante pero no sé si seguro para justificar su precio. Claro que entiendo que está solamente enfocado a un mercado muy concreto.
r a g n o r
Ojalá empezaran a sacar móviles con este formato.
miguelxataka
¿350 euros? ¿En serio?
Venga, hasta luego.
geisoncruz
Jajaja 350 Euros... en República Dominicana son RD$20,282.50 pesos... con eso me compro un iPhone 7 normal o un iPhone 7 plus en buenas condiciones.
No se que se fumo Sony pero si creen que van a revivir el Walkman con ese precio, están bien feo.
dbrel
Bueno, aclara el articulo a varios les viene bien un teléfono celular. Lastima el precio pero estaría deseoso de poder adquirirlo, aquí en Argentina sale 4 sueldos mínimos.
El uso es especifico para escuchar música, el teléfono hay otras distracciones, esto es para disfrutar de un álbum en donde sea sin interrupciones y con gran calidad. No tiene que irse al esoterismo en audio, sino disfrutar con un sonido solvente de tu música en digital. Otra ventaja se puede agregar los servicios de Audio en Streaming. Lastima que no posea radio, pero bueno, también queda claro que agregándole una memoria con gran cantidad de música, no te hace falta.
Fiio tambien tiene otro interesante player, con Android más reducido, habrá que comparar para ver cual elegir.
kanete
¿Y a esto cómo le pasas la música? Para mi una de las cosas importantes del iPod y que lo hacía tan cómodo era iTunes y la forma que podías tener ambas bibliotecas musicales sincronizadas con unas listas de reproducción que se actualizaban cómodamente. ¿Pero en el mundo Android que solo puedes tirarle los archivos desde el navegador a una carpeta?
pableras
Pues es que, a ver. Cómo me confunden estos de Sony.
Por un lado, el Walkman tiene pintaza. Parece que tiene una muy buena calidad de construcción, que unido al tamaño contenido, le queda muy bien. Y parece que la calidad de sonido es alta, imprescindible para un reproductor de audio.
Pero es que por otro, la autonomía, que no es para tirar cohetes + meterle un Android completo + una capacidad de almacenamiento justo = no me parece una combinación óptima. Al final da la sensación de que intentan abarcar mucho, y ya se sabe.
Y luego, el precio. No voy a decir la cantidad de teléfonos que se pueden comprar por ese dinero y menos. Y ya si miramos de generaciones pasadas, ni te cuento. Si te vas a la competencia, y aquí me centro sólo en el precio, no en la calidad (de audio), tienes el vetusto iPod por menos dinero y con más capacidad (joder, pensé que jamás llegaría a decir esto de un producto Apple.... es más, igualando precios, el de la manzana multiplica por 8 la capacidad de almacenamiento....)
Me parece un producto, no se, con muchas aristas. Por soñar un poco, si le hubiesen añadido una cámara potable y la funcionalidad teléfono, aunque subiesen un poco el precio, hubiese sido un "quizás" (aunque dejaría de ser un Walkman para ser un minimóvil), tal y como lo han presentado es un "ni de coña".
kleiser
Con esa autonomía no sé exactamente a dónde quieren llegar. Lo principal razón por la que me puedo comprar un reproductor de música dedicado es, además de la calidad de audio, el no tener que estar cargándolo como un móvil y no drenar la batería de éste además de poder usarlo cuando quiera.
Hace ya más de 6 años que tengo un Walkman NWZ-A15 que, sin llegar a la calidad de sonido que aspiran estos modelos (y por la mitad de precio), tenía una batería con una duración teórica de 30h. A día de hoy me sigue durando tranquilamente unas 20h, usando el Bluetooth ocasionalmente y reproduciendo FLAC y MP3 320kps.
zynidiel
Un iPod a medio jubilar se come a este Walkman por los pies en dos características críticas para este tipo de productos: espacio de carga y batería. Una pena, porque el concepto es interesante pero está muy mal orientado. Si quieres centrarlo en música "en local" no montes Android, diseña un SO básico y chusquero como eran los menús de los iPods no-táctiles, que le permitan ser ligero y liberar todo el espacio posible. El usuario de un reproductor sólo quiere gestionar listas y ecualizadores. Gmail? Mapas? Calendarios? Ya hay móviles para eso, es superfluo. Tanto despliegue en hardware para luego dejarle libre al usuario menos de 7 GB de almacenamiento. Y la batería es otro desastre. El usuario de un producto así quiere cargarlo de vez en cuando, no a diario. Lo dicho, una idea interesante pero mal planteada, que se queda en tierra de nadie. Una nombre tan legendario como Walkman merece un heredero a la altura.
stasky15
350 eur... se lo van a comer con patatas.
shengdi
Ehm, nop. Yo creo que un producto de este tipo tendría sentido si y solo si tiene el precio adecuado. Para ser un reproductor de música, así tenga esa alta calidad, está al precio de un smartphone que puede hacer eso y muchísimo más.
Tiene cosas que, bajo mi punto de vista, le sobran y otras que le faltan. Por ejemplo, la pantalla podría tener una menor resolución para abaratar los costes. También podrían haber usado una versión aún más simplificada de Android para que haga solo lo que se le pide (que es reproducir música).
Tiene 16GB de almacenamiento y solo 5GB están disponibles, eso es una enorme falla, ya que los archivos musicales (que se supone que en este caso deberían ser de gran calidad, y por lo tanto pesar mucho mas) ocupan mucho espacio.
Autonomía muy muy pobre, y eso que el reproductor no tiene capacidad para poner una SIM (y poder usar el Streaming mediante red celular, por ejemplo).
En fin, muy bonito, muy buenas las intenciones, pero Sony está dando un producto muy costoso para lo que ofrece.
antoniosanchez3
350€ 😱😱😱
Por eso me compro un Xiaomi pepinaco y escucho música igualmente
marceloquirico
Escuchar música "como antes" es un reproductor portátil con radio AM/FM y soporte de almacenamiento extraible (aunque en este caso permite usar tarjetas micro SD). Hoy en día ya no traen ni radio FM, es cualquiera.
Pero esto de Sony es otro desesperado intento de revivir su marca Walkman (que en otros tiempos era sinónimo del verdadero reproductor musical portátil, el que permitía cambiar de música sin preocuparse por la capacidad del medio de almacenamiento -no llevábamos gigas de música de la cual solo escuchan la mayoría unas diez o veinte canciones, llevábamos la más imprescindible-, escuchar radios sin importar si eran AM o FM, no preocuparse de quedarse sin batería porque en cualquier lugar se conseguía un par de pilas AA e incluso grabar de la radio) después del fracaso del Minidisc.
krolmag
350 euros... ridículo
augustoberrio2
Solo me queda una pregunta, se que Sony en sonido es muy bueno, pero por las dimensiones y el proposito del dispositivo, quiero saber si ofrece mayor potencia de salida conectado al auxiliar de mi equipo de sonido como la que ofrecía el Sony-Ericsson W600 frente a los smartphones de hoy que son mas "comedidos" en ese aspecto y por el que tanto me gustaba ese móvil en aquella época, o si es para una experiencia mas "personal" de alta fidelidad con auriculares solamente. Muy buen análisis por cierto, felicidades
oortegaa
A mí me agrada la idea de tener un reproductor independiente de música, con eso te libras de conectar tu celular a una bocina remota y no estar ligada a ello, donde se puede interrumpir por notificaciones, no te puedes alejar tanto de la bocina y por el consumo de la batería. Serviría para cuando vas a algún evento y te toca poner la música para todos.
Me gustaría que adicional tuviera reproducción de video, para si cuando andas de viaje puedas conectar a otro dispositivo ( tv, tablets, etc) sobre todo pensando en los que tenemos niños.
rossrhodes
Aun uso un ipod Classic de 160gb, y los servicios alternativos, en la variedad esta el gusto