Con una cifra millonaria acordada y el avión finalmente reservado, seguramente lo único que le quedaba por pensar a Harry Kane antes de su fichaje por el Bayern de Múnich era decidir el reloj que llevaría en su presentación oficial.
Porque, aunque el delantero no sepa cuántas bromas relacionadas con los pantalones de cuero va a protagonizar en las próximas semanas, lo que está claro es que sabe lo que hace en materia de relojes. Mientras que la mayoría de los futbolistas se gastan el dinero que tanto les cuesta ganar en los relojes más ostentosos que también tienen sus compañeros (versiones de acero a oro del Rolex Daytona, el Audemars Piguet Royal Oak, el Patek Philippe Nautilus o el Aquanaut, dependiendo de su salario), Harry Kane ha demostrado tener un conocimiento superior en cuanto a relojería. De hecho, de toda la selección inglesa, su colección es sin duda la mejor.
Un reloj exclusivo para conocedores
Pero el último movimiento del futbolista inglés solo ha reforzado la idea de que es un auténtico experto. Después de todo, no es casualidad que el nuevo Patek Philippe Platinum Grand Complication ref 5470P fuese el reloj que Harry Kane lució en su primera aparición con el equipo alemán. ¿La prueba? Aparte de pasar por alto las listas de espera y el pequeño problema de su precio estimado de 957,000 dólares, para que este reloj esté siquiera en tu radar, hay que apreciar la buena relojería.
Como dijo el experto en relojería Jack Forster cuando este modelo salió a la venta el año pasado: “[El Patek Philippe Platinum Grand Complication] posee un diseño bellamente tradicional con una de las relojerías más sofisticadas y refinadas que he visto jamás... y la prueba de que si quieres un verdadero contenido relojero por tu dinero duramente ganado, sigue siendo muy difícil superar a Patek Philippe”.
Sin entrar en tecnicismos, este Patek es un reloj con cronógrafo monopulsador de 1/10 de segundo, lo que significa que la aguja roja que se supone que es un segundero estándar gira en realidad alrededor de la esfera una vez cada 12 segundos. Preguntarse por qué no suele ser lo importante —no es una pregunta que sirva de mucho en relojería—, pero la artesanía que se emplea en crear este sofisticado sistema oscilante no tiene rival.
Y si los dotes de este reloj no son suficientes para creer en el gran bagaje relojero de Harry Kane, Nick Gould, experto en horología, afirma que “[Kane] es un coleccionista de PP, así que supongo que le pareció una opción más deportiva para su presentación”. Es probable que el futbolista británico simplemente se decantara por este reloj cronógrafo debido a los detalles en rojo y azul que combinan a la perfección con la paleta de colores del Bayern Munich, sin embargo, no podemos restarle crédito, pues el mero hecho de pensar en Patek Philippe demuestra cierto conocimiento que va más allá de las marcas más obvias.
Artículo publicado originalmente en GQ Reino Unido.